Nuestro viaje desde el pueblo de Panajachél, a orillas del Lago Atitlán, hasta las ruinas mayas de Tikal nos hizo atravesar las montañas centrales de Guatemala, de gran belleza y con una vegetación creciente, en la medida que nos acercamos a la selva del norte del país. Caminos lindos y no tantos (ver fotos) nos acompañaron y cada tanto cruzamos algún pueblo con el mercado a toda actividad. En el norte pasamos por unas aldeas de extrema pobreza, con chozas de paja en medio de la selva. El viaje nos tomó dos días pernoctando el primero en Cobán, una ciudad del interior muy bulliciosa, donde dormimos en un antiguo convento de monjas (lugar muy modesto) que a decir de la recepcionista, tenía un túnel por debajo del camino hasta el monasterio de los monjes!
La segunda noche disfrutamos de la isla de Flores en el Lago Petén Itza, un lugar hermosísimo y muy apacible.
1 comentario:
Que manera de viajar y de meterse en el fondo del país....!!!
Me costó encontrar en el mapa el punto 'pérdido' de Tikal.....y no son muchos los caminos para llegar...y no es la puerta de al lado....!!!
Pero claro, sabiendo lo que iban a buscar, bien valía la pena hacer un "pequeño" desvío. No hay dudas que historicamente es algo muy especial pero, ésto no quita que se necesita una buena dosis de voluntad y dedicación para llegar hasta allá !! 'Chapeau' por ésta nueva excursión !!
:::Y despuès, como sigue la película ??? vía Belice ?? o vuelta por el mismo camino hasta la ciudad de Guatemala ???
Seguro que en el próximo capítulo tandré la respuesta...!!
Que sigan teniendo buena ruta y alegrías.
Con todo nuestro apoyo y los cariños de siempre.
André + Cuqui
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