martes, 24 de junio de 2008

Watson Lake


Después del camino aventurero llegamos a la pequeña ciudad de Watson Lake, encontrándonos nuevamente con la Alaska Highway. Cuando construyeron esa ruta en el año 1942, un soldado sintió mucha nostalgia y colgó un cartel con el nombre de su pueblo natal. En poco tiempo lo imitaron otros y hoy, 66 años después hay un mar de carteles de todos los lugares del mundo. Una atracción con nostalgia.
Por la noche fuimos a una presentación de las luces boreales que se pueden observar en el cielo en invierno. Estas luces móviles de varios colores se proyectan en el cielo del norte por el efecto de la radiación solar y el magnetismo de la tierra. Un fenómeno muy interesante.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que corajuda Viky , para poder fotografiar a eso oso.
Les gusto el espectaculo de las Luces.
Dicen que es un espexctaculo impagable
Confio ver algunas fotos
NormaL